porqué las máquinas contestan a mis llamadas

hoy veo que he de volver, allí

donde es tu aquí y mi nada

lloro ronco por ver lo que veo sin ir

y sabiendo que al llegar lloraré de verdad

atados de manos os imagino cojos

tapados de ojos os siento mancos

y entre tanta losa por cerebro os deseo

lejos, y aun voy, cabizbajo y nómada, teñido de sol

llamo y sólo máquinas, aunando lazos con mazos y desolación

nada

no pregunto nada, nada
se de si vienes o vas, voy
viniendo, eso es todo, todo
pasa a un tiempo ajeno, lejano
paseo entre días descontados a la
cuenta corriente y moliente de la
ausencia de preguntas, nada pregunto,
no se si vienes o vas, voy viniendo,
descontando rayos al sol

aquí queda todo lo demás

aqui queda esto!
he visto en tus ojos el hueco de los míos
he sentido de tus labios el silencio de esta voz
he notado entre la ropa de tu abrazo la extraña vibración de mis huesos
aquí queda esto!
sigo la estela de la canción erizada en la palmera desde donde acaricio tu cuerpo desnudo,
mientras nos vemos sin mirarnos
mientras nos encantamos
mientras nos soñamos desnudos y jugotones
aquí queda esto, aquello y todo lo demás

primer paso en la versión libre de un poema de j. gelman

un susurro de amor
va de mi cuerpo al tuyo
en una hermosa canción

palabra viento

se acerca, en un murmullo entre el baile de verdes con la luz,
el viento
caminante, vacío agitador inmaculado, inevidente
en los muros del reposo.
mar del cielo
verde ascenso
pies de tierra
palabra viento

en balde

hablo al mar
nada oigo
trago de voz en el oleaje
viaje en balde

solo los peces saben a mar

circuito cerrado en digestión
atención en el reflejo de una foto
de un cuento de un silencio
en un tiempo dado
imaginando un cubo con sus
seis caras cantando números
y horas cuadradas del azar:
abrazame
conquista el terreno de esta voz
que consume y colma el pulso
en este mar donde evoco tu cuerpo
abrazame
haz de esa tierra un hogar de bichos
y cosas alentando amaneceres líquidos
lleva lejos donde todo se transforma
las sombras del viento seco que peina
las olas del blanco mar, voz cautiva
abrazame
calma con el mar de todos los ríos
el terruño ajado que aun emano
aquí abajo
abrazame
susurra en mis labios el sabor amigo
aqui
ahora
abrazame
hasta el final, donde solo los peces saben a mar